¿QUÉ NO SOMOS?
"Muchos religiosos entraron sin conocerse, viven sin amarse y mueren sin llorarse" (Voltaire)
No somos “católicos” excluyentes, ni tenemos nuestra fe puesta en el culto a la “personalidad” de ningún dirigente; tampoco creemos en las doctrinas de los hombres, no creemos en una comunidad piramidal monárquica.
No somos cristianos de formas… ni mucho menos tenemos una fe con supersticiones.
Hemos asumido que Jesús de Nazaret es nuestro Pastor Supremo y por tanto, es nuestra única comunión con la comunidad universal. Nuestra “catolicidad” más que ser institucionalidad, es una práctica de inclusión y complemento en el anuncio de la Buena Nueva.
No somos cristianos de formas… ni mucho menos tenemos una fe con supersticiones.
Hemos asumido que Jesús de Nazaret es nuestro Pastor Supremo y por tanto, es nuestra única comunión con la comunidad universal. Nuestra “catolicidad” más que ser institucionalidad, es una práctica de inclusión y complemento en el anuncio de la Buena Nueva.